Rodeada de vides serenas, la Casa en El Viñedo respira tranquilidad. En un paisaje etéreo, la naturaleza y la vivienda convergen armónicamente tejiendo calidez en cada rincón. La casa entendida como eco del lugar: piedra, madera y cal cuentan historias silenciosas a través de un recorrido ceremonial que predispone a la persona a sentir este lugar. Enraizando paisaje y vivencia al hogar que emerge.
Entre las raíces subterráneas, una cueva preexistente atesora secretos del tiempo, susurra historias de cosechas y sueños guardados en cada barrica de la bodega ancestral. La Casa en El Viñedo, el concepto de cofre, dónde los espacios se abren y cierran al paisaje mediante grandes paños móviles, desvela y oculta la poesía silente del paisaje. Para sentir el exterior dentro la casa.
“Los límites son en realidad principal en el espacio, así como el presente, otro límite, es el factor principal en el tiempo”. Eduardo Chillida